VALE URZÚA

Soy Tendencia | Influencer
Por: Carolina Espinosa
Imágenes: Gentileza de Vale Urzúa

Cuando por primera vez escuché la historia que había detrás del fenómeno de Soy Tendencia, me llamó la atención el coraje y la perseverancia que había detrás de su creadora, Valentina Urzúa. Una serenense que, después de recibir un 1.9 como nota en su tesis final de carrera, el año 2013, insiste con la idea, decide trabajarla más, la vuelve a presentar, y obtiene la mejor nota. Hoy, después de 5 años, no sólo es capaz de vivir de la idea con la cual se tituló, sino que además lo pasa genial haciéndolo! ¿interesante no?

¿Cómo puede ser que unos profesores te pongan la peor nota del curso cuando presentas por primera vez una idea y cuando la presentas nuevamente, más trabajada, logras la mejor nota? Pasas de lo peor a lo mejor ¿A qué atribuyes esto? Y por otro lado ¿Qué fue lo que te hizo seguir con el proyecto cuando te dan un "NO" tajante?

La vida es muy sabia. Esa cosa tan chica que me paso en mi vida, ha sido determinante en muchas cosas a lo largo de todo lo que ha sido Soy Tendencia. Siento que era lo que tenía que pasar, era el aprendizaje que tenía que tener. Aprendí que no tengo que esperar que nadie confíe en mis proyectos para lanzarme, depende netamente de mí y de nadie más. Cuando lo presenté por primera vez, sí le faltaban algunas cosas, era una idea demasiado visionaria y quizás por eso me lo vetaron. Los profesores en mi universidad no te enseñaban, no te motivaban a emprender y esto era algo mío, era un emprendimiento, un cuento totalmente visionario para ese minuto y por eso deben haber pensado: "Esta niñita está loca...chao que cambie el proyecto". Pero puse en práctica la idea. El "NO" me dio más fuerza para lanzar este proyecto adelante y después, cuando vieron que el proyecto funcionaba, deben haber dicho "mierda, nos equivocamos con esta chica". Sin duda era un proyecto demasiado visionario para la mente de esos profesores.

Estudié 5 años una carrera que no me gustaba, no era mi pasión, pero me iba bien. Yo soy demasiado apasionada con todo lo que hago, con mis amigos, con mis clientes, con mis cosas en mi vida diaria y en esta carrera me faltaba esa pasión. Con la idea de Soy Tendencia nació esa pasión, se encendió esa llamita y cuando me dijeron que tenía que cambiar el proyecto, sentí que me estaban apagando esa llamita, después de descubrir que la tenía. Vibraba con Soy Tendencia y no podía hacerme la tonta con eso, tenía que escuchar mi intuición y ese era mi camino, esto fue lo que me hizo seguir, era algo que me hacía tan feliz, que me hacía vibrar. Con Soy Tendencia descubrí la pasión por lo que había estudiado.

¿Cómo definirías Soy Tendencia? Y de ese proyecto original de tesis a lo que es hoy ¿Cómo ha ido evolucionando?

Es lo más importante que tengo en mi vida, como un hijo. Es todo, mi vida gira en torno a esto. No es un trabajo, es mi vida. Es mi proyecto, mi emprendimiento, yo me desvivo por esto y lo hago porque me hace feliz, no hay ninguna otra razón que me haga estar en esto más que lo feliz que me siento al hacerlo. Todos los años cambia, todos los años crece un poco más. A veces es un poco frustrante porque una quiere que los cambios sean radicales, ahora ya. Me demoré 3 años en que el proyecto sea estable, cuesta, es duro emprender, pero por un lado miro para atrás y digo "¡que rico!" porque cada año voy creciendo un poco más, cada año va cambiando, se le van agregando nuevas ramitas y por lo mismo, no sé cómo va a ser en 10 años más. Me encantaría estar en esto toda mi vida, porque da para mucho.

Algo que combine tus pasiones, viajar y moda, parece ser el trabajo soñado, pero por mucho que sean tus pasiones no deja de ser un trabajo. ¿Cómo te desconectas? ¿Hay viajes en los que realmente no estés buscando las últimas tendencias y sólo vayas a descansar?

Sí, es un trabajo soñado. Cuando descubrí los viajes, ya estaba con Soy Tendencia. Los viajes fueron la última ramita que se sumó y así descubrí que me apasiona viajar, yo no quiero trabajar todo un año y tener 3 semanas de vacaciones, entonces fui armando una forma de ganarme la vida, con las cosas que me apasionaban hacer: la ropa, las redes sociales, los viajes. Junte todo y arme un modelo de negocio. No es fácil, me demoré 3 años en ver plata, pero se puede. Hay viajes de todo tipo, unos enfocados cien por ciento en compras, otros en inspirarme, otros en una búsqueda interior, tengo viajes para todo. Trato de desconectarme cuando hago deporte, meditando, cuando hago yoga y en los viajes, aunque entiendo que es mi trabajo, no dejo que esto me coma por completo. En los primeros años me comió y tuve una depresión importante, aprendí a manejarlo y ahora estoy muy feliz. En los viajes siempre hay un minuto para desconectarse y apreciar donde estas, para valorar, para dar gracias, para contemplar.

Cuando estoy en Chile me desconecto yendo a ver a mis papás a la Serena, volviendo a mis raíces, escapándome al sur. Me consume la ciudad, necesito esas vías de escape.

Ser una de las voces de las tendencias de moda implica ir un paso adelante, ser rupturista y propositiva, ¿En qué te fijas cuando buscas las tendencias?

Soy una persona muy observadora, con mucha memoria visual. Observo mucho a la gente, cómo se viste, veo las revistas, películas y no lo hago porque sea mi trabajo, lo hago porque me gusta. Y ahí voy viendo las tendencias, pero siempre siguiendo mi estilo. Entendí que tenía que ser yo y ser autentica, y eso mismo hago con mis colecciones, con todo. Compro lo que yo quiero usar y no necesariamente lo que es comercial, yo soy la marca, yo vendo mi ropa. Sigo mi intuición, mi estilo, conozco mi estilo, sé lo que me gusta y lo que no. La clave es seguir la intuición y al corazón.

Según tu experiencia ¿Qué hace que algo llegue a ser tendencia?

Hoy en día cualquier cosa puede llegar a ser tendencia, tiene que haber un líder que empiece a impulsar y promover la tendencia, cualquier cosa puede ser tendencia. Las tendencias están en las calles, no en las pasarelas. Los líderes son muy importantes en ese sentido.

Los viajes forman parte de tu vida. Casi siempre cuando viajamos a un lugar nuevo, tenemos ciertas expectativas ¿Qué lugar ha sido el que más te ha sorprendido y por qué?

Intento no hacerme expectativas con un viaje, es difícil, pero trato de hacerlo porque muchas veces uno se decepciona. Creo que sin duda el país que, por lejos, más me ha emocionado porque creo que no tenía expectativas realmente y porque no sabía a lo que iba, fue India. Me cambio la vida, después de ese viaje soy otra persona. Es un lugar que todos tenemos que conocer.

¿Cuál ha sido la mejor y la peor experiencia que te ha tocado vivir con Soy Tendencia?

Qué difícil elegir una. Tengo muchas, muchas, muchas. El año pasado fue muy importante para "Soy Tendencia", cerré contratos increíbles con muchas marcas, di charlas para muchas personas, conocí gente que me marcó, ahora estoy en aeropuerto de Bali camino a Chile y también te puedo decir que es una de las cosas más importantes que me ha pasado, soy una agradecida de todo, no te podría decir sólo una experiencia. Soy muy afortunada y agradecida por esto mismo.

La peor, hay varias, pero me muevo en un mundo muy espiritual donde no hay malas experiencias. Son experiencias y sí, he pasado malos ratos, pero ahora miro para atrás y pienso, menos mal me pasó eso porque aprendí esto, entonces al final no te podría decir algo puntual, he aprendido a ser más precavida y eso lo transforma en una buena experiencia.

¿Chile es un país que crea, busca o sigue tendencias?

Absolutamente es un país que sigue las tendencias, pero tampoco tanto. Chile es un país que copia todo lo de afuera, pero lo copia a medias, las chilenas en general no tienen un estilo. Cuando logramos encontrar nuestro estilo, que es un trabajo muy difícil, muy de conectarnos con el interior, todo fluye. Si sabes lo que te gusta y lo que no, eres autentica y siento que a las chilenas les falta mucho eso, copian y copian a medias porque después les da vergüenza.

¿Cómo se proyecta Soy Tendencia?

Muchas cosas que hacer, muchísimas. Tenemos varios proyectos para por lo menos tres años más, uno de ellos es hacer un bar, y otros que no puedo contar porque quiero que resulten, pero lo que sí te puedo decir es que yo me veo toda la vida trabajando en esto, viajando como loca, comprando ropa, haciendo muchas cosas. Hay Soy Tendencia para rato.